Para estudiar el idioma tibetano, primero aprendemos el alfabeto y su pronunciación, y luego practicamos su escritura.

El alfabeto que vamos a utilizar es el UCHEN o “letras con cabeza”. Se llama así porque se parte de una línea en la parte superior e ir siempre de arriba hacia abajo y de izquierda a derecha para trazar las letras, es lo más parecido a nuestra “letra de imprenta”.

Es importante practicar hasta tener soltura y que la letra sea clara y uniforme, se le da mucha importancia porque tanto la lengua como la caligrafía tibetana han servido desde el principio para recoger y transmitir las enseñanzas de Buda así como los comentarios de los maestros de todas las escuelas y que pudiesen ser transmitidos de manera fidedigna a las generaciones futuras.

Lo mejor para practicar es tener plumas  hechas de caña de bambú cortadas de manera especial o plumines de diferentes anchos para usar con palillero y tintero, a la antigua usanza. Si no se dispone de estos materiales se pueden utilizar rotuladores de punta rectangular, cuya escritura es muy similar a las de las plumas antiguas. En cualquier caso se requiere destreza para que el resultado sea artístico.

El papel para escribir el alfabeto UCHEN o “con cabeza” debe ser un papel rayado horizontal, los profesionales rayan su propio papel con lápiz y luego borran las líneas, nosotros podemos usar una simple hoja de papel de una raya, también sirve papel milimetrado, al menos para las prácticas es indispensable, caso contrario el resultado puede ser lamentable (por propia experiencia).
Los tibetanos tienen unos cuadernillos de práctica con tres rayas, pero no son fáciles de adquirir en occidente.

Una vez tenemos los materiales adecuados, vamos a empezar a practicar la escritura del alfabeto tibetano al mismo tiempo que lo recordamos.

Empezamos por trabajar con las consonantes de la primera serie: 

 

   

 

   

 

Recordad que estamos trabajando con el alfabeto UCHEN o “con cabeza” lo que en este caso quiere decir que empezamos el trazo por la línea superior y seguimos las indicaciones de la figura para  la realización de los trazos.

¡ A practicar !

Rafael Herranz