Queremos compartir con vosotros un vídeo, elaborado por el Centro del Dalai Lama para la paz y la educación, que habla de lo importante que es educar las emociones.

«Cuando un niño nace hacemos todo lo posible para protegerlo, nutrirlo, amarlo. El corazón y la mente del niño son frágiles.

A medida que crecen los queremos enseñar todo aquello que sabemos. Los enviamos a la escuela para llenar su mente con conocimientos maravillosos, para darles las herramientas que necesitan para vivir la vida.

En la escuela probarán cómo son las cosas en el mundo de fuera: amistad, amor, decepción, vergüenza, discriminación y acoso escolar. Sin embargo, las herramientas que les ofrecemos no les preparan para este mundo.

Tenemos una responsabilidad muy grande, y una oportunidad increíble. Si realmente les queremos preparar para la vida, también debemos: educar el corazón para que puedan navegar por la vida con compasión, aceptación, tolerancia. Necesitamos enseñarles compasión, aceptación y tolerancia.

Esto puede empezar en nuestras escuelas y puede empezar hoy. Puede suceder jugando al hockey, en la clase de danza, en los campamentos o en la lección de música. Y ya está sucediendo alrededor del mundo con resultados asombrosos. Si queremos que nuestros niños crezcan debemos pedir una educación equilibrada que ponga el énfasis en educar los dos: la mente y el corazón».

Prepárales para este mundo. Educa el corazón

No podremos enseñar a otros aquello que nosotros mismos desconocemos. Debemos educar nuestras emociones para poder guiar a nuestros niños y nuestros jóvenes. Desde ahora mismo, desde el presente, podemos construir un futuro más equilibrado para todos.